Dos años después de la muerte del dictador Francisco Franco, el gobierno de Suárez establece la ley del olvido… una ley que pretende unir a la población sin atender a los motivos que la separaron. Una ley que prohibe dar justicia a los crímenes del franquismo (de lesa humanidad), ocurridos a lo largo de 40 años. Una ley que quiere enterrar para siempre la memoria de lo vivido.
“Es simplemente un olvido, una amnístia de todos para todos, un olvido de todos para todos. Una ley puede establecer el olvido, pero ese olvido ha de bajar a toda la sociedad. Hemos de procurar que esta concepción del olvido se vaya generalizando porque es la única manera de que podamos darnos la mano sin rencor”. Xabier Arzalluz. Congreso de los Diputados, 15 de octubre de 1977.
Pero no se le puede pedir a alguien que olvide su dolor, que olvide que mataron a sus seres queridos a la claridad del alba, en una cuneta cualquiera tras sacarlos de casa a golpes e insultos, que le robaron a su bebe sin ni siquiera verlo nacer, que vivió entre la muerte, el miedo, la pena y un lamento silencioso… bajo el regimen de una dictadura. ¡¡¡Es imposible!!! no se olvida aquello que llevamos impreso en nuestra piel, un dolor que se inserta en el alma y que formará parte de todas las generaciones venideras, un dolor convertido en odio por no recibir justicia.
“No es fácil olvidar, aún queriendo hacerlo”.
Para poder darnos la mano sin rencor hay que reconocer los errores del pasado, hay que penalizar los actos que se cometieron contra la población civil y hay que poder decir adios a aquellos que con su vida pagaron la historia, una historia que ante todo debe ser reconocida y recordada. ¡Y no silenciada! arrancada de la garganta de sus víctimas, de nuestros abuelos y abuelas, para que 40 años después casi ya sepultada, con los verdugos libres, no recordemos que siguen ahí. Y vuelvan a ganar ellos.
Si ya sabemos que conociendo la historia que aconteció en la época de nuestros antepasados, estamos más preparados para no repetirla (lo que mira al fututo y no al pasado), ¿por qué seguir con una ley que impide juzgar delitos considerados imprescriptibles? Por nuestra parte, creemos que está bastante claro…
“Al final los otros eran los menos, pero tenían el poder entre sus manos para silenciar la historia”.
El silencio de otros es un documental que pretender romper ese pacto de silencio. Narra la búsqueda de aquellas personas desaparecidas durante la época de Franco y los intentos de hacer frente a los responsables. Después de décadas de silencio, la sociedad española supo que centenares de niños fueron robados antes y durante la dictadura. Pero no sólo eso, ya que la película abarca torturas, ejecuciones extra judiciales, el tema de fosas comunes, y todo un proceso judicial internacional. A través de sus historias se puede llegar a conocer la lucha de un país que quiere reconciliarse con su pasado, mirando al futuro.
Documental dirigido por Almudena Carracedo y Robert Bahar.
Se le vio, caminando entre fusiles,
por una calle larga,
salir al campo frío,
aún con estrellas de la madrugada.
Mataron a Federico
cuando la luz asomaba.
El pelotón de verdugos
no osó mirarle la cara.
Todos cerraron los ojos;
rezaron: ¡ni Dios te salva!
Muerto cayó Federico
—sangre en la frente y plomo en las entrañas—
… Que fue en Granada el crimen
sabed —¡pobre Granada!—, en su Granada.
Antonio Machado