Después de un mes y medio de actividades relacionadas con «SomOS Guadalquivir» nos apetecía hacer un repaso a las sensaciones y experiencias vividas que, como suele suceder, superan con creces las expectativas. Después de un año sin apenas posibilidad de trabajar en lo que más nos gusta, esta nueva oportunidad ha sido como un día de nubes y lluvia justo antes de despuntar las primeras flores de Primavera. Con ese agua que empuja y da energía para que crezcan los brotes verdes y refresquen las ideas, los impulsos y evoluciones que siempre nos han acompañado.

Desde hace años nos hemos embarcado en un complejo y profundo viaje hacia el entendimiento de nuestro río. Ya desde finales de Marzo nos hemos decidido a que nos acompañéis en ese viaje. Queremos seguir descubriendo, compartiendo saberes y sensibilizando sobre lo que ya sabemos que es algo muy grande. Sin olvidar que cuanto más lo entendamos, menos sabremos a ciencia cierta, pero más y mejor nos comprenderemos a nosotr@s mism@s. Y más y mejor, seremos capaces de adaptarnos a los tiempos que se avecinan. El agua es la base, el río es vida, el Guadalquivir es un millón de cosas; y el futuro es comprender, escuchar y sentir para mejorar nuestra relación con el entorno humano y natural.

Hemos atravesado dunas y tarajes a ritmo de pedalada, sorteando vacas y yeguas semisalvajes, pasando por la morada de los camaleones, descubriendo miles de alas al unísono despertando un vuelo negro y rosa. Hemos paseado el Guadalquivir y sus mundos, sorprendiéndonos con hallazgos que nos cuentan la evolución de la vida, como la similitud entre un rape y un sapo, flipando con la belleza de una manta raya o la agilidad pescadora de una garceta común, sin olvidarnos de una melodía mañanera salida a borbotones de un pequeño ruiseñor y que queda grabada en el oido y la retina para el fin de los días. Hemos visto explotaciones ancestrales e increíbles usos etnográficos que han enriquecido nuestro paisaje rural y urbano: con huertos que recuerdan a oasis del desierto, corrales de pesca quu atesoran la inteligencia de nuestr@s antepasad@s y pequeñas explotaciones salineras que multiplican la vida. Hemos trasteado con las huellas y rastros, debatido sobre la vida sencilla y los aprovechamientos a pequeña escala. Hemos jugado a los viajes en el tiempo y recordado las historias del río que han sido olvidadas o directamente no contadas. Hemos hecho todo esto con grandes y pequeños. Y aún hemos tenido tiempo para arrejuntarnos con otr@s compañer@s que también aman este río, para seguir creciendo y compartiendo junt@s, para seguir avanzando.

20 grupos diferentes del IES Doñana y soci@s de Hadiqa, más dos jornadas con ecologistas en acción, uno de ellos junto a l@s compañer@s de Trebujena de la  Asoc. Río Limpio, con l@s que queremos seguir colaborando. En total, más de 400 participantes (entre estudiantes y adultos). De todo lo vivido, nos quedamos sin duda con este último encuentro en los Pagos de Trebujena y todo lo que aprendemos de tod@s. Aunque la mayor parte del tiempo estamos de espaldas a la naturaleza, es increible como ésta se encarga de poner las cosas en su sitio. Cuando se nos pone delante, al final tod@s sucumbimos de una u otra manera. Y además, debemos recordar, nunca nos cansaremos, que el amor por nuestro entorno no tiene fronteras y no es exclusivo del que conoce desde lo académico, sino también del que lo vive, tal y como nos han demostrado siempre l@s hij@s de saliner@s, marismeñ@s, camaroner@s, mariner@s, chocer@s, riacher@s, habitantes del Poblado de la Plancha (Coto de Doñana)… y much@s otr@s seres sensibles. Gracias por compartir tanto saber…

En breve llega Junio y aprovecharemos este último mes de primavera para seguir difundiendo y participando en la puesta en valor y la conservación de nuestro entorno. Vendrán actividades como «Guadalquivir. Navegante no hay camino», centrado en la circunnavegación y asociado a ella, en el entendimiento del paisaje y la cultura; y su transformación a lo largo del tiempo. Otras rutas para adultos como «Brazo del Este, La Gran Transformación». O una jornada de anillamiento de aves «urbanas» en una de las pocas islas de vegetación que nos quedan en el paisaje urbano de Sanlúcar de Barrameda. Ésta última junto a Ecologistas en Acción, Luciferi Gin Doñana y Grupo ornitológico Zamalla.

Os recordamos que Hadiqa colabora con el proyecto Derecho Humano al Agua y Ecosistemas Acuáticos: Construyendo Estrategias de Incidencia desde Andalucía”. Un proyecto financiado por la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional coordinado por Ecotono S.Coop.And de int. Social, que como objetivo principal contribuir a que asociaciones, organizaciones y administraciones públicas competentes en materia de aguas de Andalucía participen en la mejora y conservación de los ecosistemas acuáticos, teniendo como referencias: el Derecho Humano al Agua y Saneamiento, la Directiva Marco del Agua (DMA) y la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030 de las Naciones Unidas. También nos hemos unido a la Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA), que está impulsando la investigación y divulgación en cuestiones relacionadas con el agua, como en esta pedazo de campaña: «Desmontando falacias sobre agua y cambio climático».

Un abrazo virtual a tod@s. Nos veremos junto a nuestro rio.

Abril 21' Somos Guadalquivir

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